Dando un paso más allá tratando de alcanzar la excelencia en el trato al viajero, al visitante, a ese turista que busca la esencia del lugar en el que se encuentra, tabernas, restaurantes y hoteles se hacen parte del entorno que los rodea, se mimetizan, participan y contribuyen a formar esa buscada esencia.
El turista aprecia el respeto por el entorno, de lo auténtico, sin entrar en tipismos propios de la zona. Andalucía disfruta y sufre de estos tópicos que debemos usar apropiadamente. Abarcando todos los sentidos del visitante, dedicándole esfuerzo a adecuar restaurantes y hoteles a la temática propia que los rodea, creando un clima que sumerja al visitante en la idiosincrasia de nuestro pueblo. Deben entender el por qué de nuestras costumbres, nuestro beber y por supuesto la gastronomía que enriquece nuestra forma de ser. Adaptar las elaboraciones culinarias propias de nuestra historia a la actualidad, manteniendo la esencia de sus orígenes y aportando toques modernos que encajen con los gustos del comensal de fuera, quizás acostumbrado a otros sabores.
En Bodegas Mezquita se sumerge al visitante en la atmósfera cordobesa más auténtica. Su personal conecta directamente con la necesidad del cliente de disfrutar de la mesa, del trato, de la afabilidad andaluza. En un ambiente elegante a la vez que acogedor, sintiendo sabores y aromas propios de nuestro pueblo. En el marco incomparable de la Mezquita Catedral de Córdoba, realzando ese entorno, con la gastronomía más autóctona, respetando lo original y dotándola de un toque especial que provoca la admiración de los comensales que buscan los sabores de la ciudad. Partiendo de unas materias primas propias de la zona se genera que el visitante se interese por ellas, por los caldos de la tierra, por los ingredientes que han saboreado. Para ello se cierra el círculo de atención a ese turista con la Tienda Gourmet, donde la gente puede adquirir lo que ha disfrutado.
El turista así se irá satisfecho de haber conocido la realidad del lugar por el que ha paseado, comido y disfrutado. Un gran sector del turismo se siente saturado de artificio, de producto creado solo para él, distando mucho de la verdad de la calle de esa ciudad, de ese pueblo, o ese acontecimiento. Cambiando esta mentalidad con la autenticidad, aseguramos una beneficiosa publicidad y tal vez…una segunda visita.